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Manejo Integral de Plagas: Control Biológico

El rendimiento de los cultivos disminuye a nivel mundial entre el 10-30% debido a las plagas de insectos. Sin embargo, el uso de agrotóxicos en las últimas décadas ha causado plagas resistentes, daño al medio ambiente y a la salud humana. Es por ello que la implementación de un sistema que mejore las prácticas culturales respecto al medio ambiente, la variedad del cultivo y los métodos apropiados para el control de plagas y enfermedades cada día se hace más necesaria (1).

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) el Manejo Integrado de Plagas (MIP) es una metodología que emplea todos los procedimientos aceptables desde el punto de vista económico, ecológico y toxicológico para mantener las poblaciones de organismos nocivos por debajo del umbral económico, aprovechando, en la mayor medida posible, los factores naturales que limitan la propagación de dichos organismos.

En otras palabras, el Manejo Integral de Plagas tiene como objetivo capacitar al agricultor para implementar y adaptar los nuevos métodos de control no químicos para el control de plagas, es decir, el control biológico.

Entonces ¿en qué consiste el control biológico? Es el uso de bacterias, hongos, parásitos y depredadores naturales contra aquellos que causan daño, las plagas. Todo esto es posible a que son enemigos naturales. Las plagas son eliminadas a nivel local o mejor, son controladas reduciendo su población para evitar las pérdidas a nivel económico (2).


Figura 1. Efecto regulador de la introducción de un enemigo natural que ejemplifica el control biológico sobre un población plaga en relación con un umbral económico (2).

A nivel ecológico, el uso del control biológico restaura la biodiversidad funcional en los ecosistemas agrícolas. Ya que se establece un equilibrio entre depredadores, parasitoides y patógenos regulando las poblaciones de cada una.

El control biológico ha sido practicado desde el siglo III en culturas como la china. Pero fue a finales del siglo XIX cuando el CB despertó un gran interés debido al éxito de la introducción de la mariquita Rodolia cardinalis para el control de la cochinilla acanalada. Desafortunadamente, dejo de ser practicado, pero los problemas ocasionados por la lucha química del control de plagas ha hecho que nuevamente se volteará a ver el control biológico como una estrategia de agricultura sostenible,  producción integrada y ecológica (3).

En Agroecology trabajamos para el desarrollo de tecnologías asesorándote en el establecimiento de estructuras ecológicas en los alrededores de los invernaderos y cultivos, así como dentro de los mismos para fomentar y consolidar el manejo ecológico de Plagas y el control biológico ya sea por conservación o inundativo.

FUENTES

1. Rogg, Helmuth W. Manejo Integrado y Control Biologico De Plagas Y Enfermedades. Quito : PROEXANT, 2000.

2. Nicholls Estrada, Clara Inés. Control biológico de insectos: un enfoque agroecológico. Medellín : Editorial Universidad de Antioquia, 2008.

3. Jacas, Josep, Caballero, Primitivo y Avilla, Jesús. El Control Biológico de Plagas y Efermedades. Castelló de la Plana : Publicaciones de la Universitat Jaume, 2005. ISBN 84-8021-514-3.

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Acerca de Remedios Fernández

Soy Gerente de Agroecology, empresa de fabricación y distribución de productos para agricultura ecológica. Con una sólida formación académica en Química, completé tanto mi Grado como mi Doctorado en la prestigiosa Universidad de Almería. Actualmente, estoy ampliando mis conocimientos en gestión de agronegocios a través del Máster Internacional en Gestión de Agronegocios en ISAM.