Nuestras necesidades alimentarias, de ropa y de combustible tienen un gran impacto en el medio ambiente. Es vital equilibrar estas demandas con la sostenibilidad a largo plazo de nuestro planeta. Una forma de lograr este objetivo es diferenciando entre los métodos de agricultura orgánica y convencional.
La superficie destinada a la producción ecológica en España aumentó el 3,5% en 2020 frente al año anterior, hasta alcanzar 10% de la superficie total agraria. Gracias a la concientización de la población en general, este sector antes considerado rechazado, ahora se encuentra en su auge debido al deseo de consumir productos saludables y no contaminados.
Esto último gracias a que la agricultura ecológica se esta convirtiendo en la alternativa más adecuada para reducir los impactos ambientales y de salud asociados con cada uno. Una forma de lograr este objetivo es diferenciando entre los métodos agricultura convencionales y ecológicos. En esta publicación exploraremos las semejanzas y diferencias entre estos enfoques, considerando sus ventajas y desventajas.
Ecológicos Vs Convencionales: Diferencias en la Elaboración de Productos Agrícolas
La agricultura convencional es el método tradicional que ha sido utilizado durante siglos. Este enfoque se centra en la producción de cultivos masivos para maximizar la eficiencia y la producción. Se utilizan productos químicos sintéticos como pesticidas y fertilizantes para aumentar el rendimiento. La agricultura convencional también utiliza maquinaria pesada para cultivar la tierra y cosechar los cultivos.
En cambio, la agricultura ecológica se centra en la producción de cultivos de manera más natural y respetuosa con el medio ambiente. La prioridad es la producción de alimentos saludables y seguros utilizando los recursos disponibles de manera sostenible. La agricultura ecológica también evita el uso de pesticidas y fertilizantes sintéticos, y se basa en técnicas de control de plagas naturales como la rotación de cultivos y la introducción de plantas compañeras.
Comparación entre los impactos ambientales de ambas prácticas
La agricultura convencional, que utiliza pesticidas, herbicidas y fertilizantes químicos, puede contaminar el agua y el suelo, así como otros entornos naturales y afectar negativamente a la biodiversidad. Además, estos productos químicos pueden quedarse en los alimentos que consumimos y aumentar nuestro riesgo de enfermedades crónicas a largo plazo.
Por otro lado, la agricultura ecológica utiliza prácticas que minimizan el impacto ambiental, como la rotación de cultivos, la fertilización orgánica y el control biológico de plagas. Los alimentos producidos de esta manera también son menos propensos a contener residuos químicos y tóxicos, lo que los hace más saludables para nosotros y para el planeta. Además, la agricultura ecológica utiliza maquinaria más ligera y depende de la mano de obra para cultivar y cosechar.
Ventajas y desventajas de ambos sistemas en términos de salud
En última instancia, es importante que apoyemos prácticas agrícolas que respeten la salud humana, incluso si eso significa sacrificios en la eficiencia de producción. Esto implica promover prácticas agrícolas que no dependan del uso de pesticidas y fertilizantes químicos, sino que, en lugar de ello, utilicen técnicas naturales como la rotación de cultivos y la utilización de compost para mejorar la fertilidad del suelo.
También es importante que los consumidores apoyen la agricultura orgánica sostenible mediante la compra de alimentos producidos de manera ecológica y la elección de productos alimenticios locales y de temporada. En definitiva, el futuro de la agricultura debe estar basado en un equilibrio entre la eficiencia de la producción y la sostenibilidad ambiental y social.
Solo así se podrán garantizar alimentos nutritivos y saludables para la población, al mismo tiempo que se preservan los recursos naturales y se promueve la diversidad biológica. Además, la agricultura sostenible puede ayudar a reducir la pobreza rural, fomentar el desarrollo local y contribuir a la seguridad alimentaria global. Por tanto, es crucial que se promueva y se invierta en la agricultura sostenible, tanto por parte de los gobiernos como de la sociedad en general, para poder construir un futuro más equitativo, justo y responsable con nuestro planeta.
¿Por qué en AgroEcology ofrecemos grandes productos para la agricultura ecológica?
En AgroEcology combinamos los principios de la ecología con la práctica de la agricultura sostenible para crear sistemas agrícolas saludables y equilibrados. En AgroEcology apoyamos la utilización de prácticas agrícolas sostenibles, como la rotación de cultivos, la agricultura de conservación y la gestión integrada de plagas, que reducen la dependencia de insumos químicos y promueven la biodiversidad y la salud del suelo. Además, nos enfocamos en las necesidades de las comunidades locales, basándonos en la participación y el conocimiento de los agricultores, lo que promueve una agricultura más justa.
En resumen, la agricultura orgánica es crucial para garantizar la seguridad alimentaria, preservar los recursos naturales, y fomentar el desarrollo local. Es importante no solo promoverlo a nivel gubernamental, sino también a nivel individual y comunitario para alcanzar un futuro más equitativo, justo y responsable con nuestro planeta.
REFERENCIAS:
Reganold, J. P., & Wachter, J. M. (2016). Organic agriculture in the twenty-first century. Nature plants, 2(2). https://doi.org/10.1038/nplants.2015.221.
